Mi lista de blogs

viernes, 22 de abril de 2011

Capitulo 18

A esa misma hora no muy lejos de allí está Raúl. Necesita estar con ella. La quiere y eso no lo duda. Pero se siente mal. Por supuesto esto no se lo ha contado a Sara, podría ser algo malo para su relación y no quiere que todo se acabe si apenas acaba de empezar. Hace dos semanas Angie, una antigua novia de Raúl ha vuelto a España después de tres años. Se había ido diciéndole que lo quería y con la promesa de que lo llamaría cada día pero esta no lo cumplió y aunque él la quería mucho supo que lo mejor era que la olvidara para siempre. La verdad es que Raúl ya casi no se acordaba de ella, solo cuando alguien la nombraba o pasaba por algún sitio que le recordara mucho a ella, cosa que no pasaba muy a menudo. Le habia hecho tanto daño cuando aquella mañana de marzo lo llamo para decirle que habia encontrado un nuevo amor.. Que no sabia por qué se lo estaba contando pero necesitaba hacerlo. Estuvo mucho tiempo llorando por ella ¿y ahora? Ahora que todo vuelve a estar bien, que quiere de verdad a una chica que le demuestra que lo quiere tiene que volver, ¿para qué? Todas estas preguntas se las ha hecho Raúl desde el dia en que apareció de nuevo en su vida. Ella se planto en su casa para decirle que se habia dado cuenta de que lo quería y otras muchas cosas que no le sentaron nada bien ya que acabo sintiéndose culpable.

Hace dos semanas en casa de Raúl y Aday.

“¿Quien podrá ser a estas horas?” Se preguntan Ambos. Raúl y Aday viven juntos desde hace tres meses en una casa de alquiler.
Raúl se levanta de la cama y sin muchas ganas de bajar las escaleras hasta la entrada de la casa llega hasta la puerta y la abre. Se ha quedado sin palabras. Es la última persona que hubiera esperado encontrar en la puerta de su casa y después de tanto tiempo. Y algo que no entiende, ¿Cómo sabia donde vive?¿ por que le ha entrado ese nerviosismo de repente?

-¿y tu que haces aquí?- Pregunta Raúl con un tono bastante seco.
-Sé que no debería de estar aquí pero desde que lo dejamos, bueno te deje, no he parado de pensar en lo mal que lo hice y el error que cometí.
-Mira Angie.. yo no sé que te habrá pasado con el chico que me dijiste que tenias y por el que me dejaste, y para serte sincero tampoco me importa, pero no veo justo de que vengas ahora después de tanto tiempo a decirme todo esto sabiendo que me hiciste sufrir mucho. Y además ¿Cómo me encontraste?
- Raúl, lo sé, sé que no soy nadie para volver a tu vida, pero sentía que tenia que decirte la verdad, necesito hablar contigo de todo lo que paso, el porque me fui, el por qué te deje dejame hablar contigo de esto. Y a tú pregunta.. estoy aquí desde hace 6 meses y creeme que he pensado esto miles de veces antes de hacerlo en todo este tiempo. Resulta que un dia me encontré con tu madre.. hará unos dos meses y le pregunte por ti. Y me dijo que estabas viviendo por aquí y me enseño una foto tuya al lado de tu casa y me dijo la calle donde vivías. Entonces supe que era esta la casa.
-Pero es que yo no quiero hablar de ese tema contigo, yo ya he hecho mi vida sin ti y si me dejaste fue porque querías al otro, punto.
-Raúl no entiendes nada.
-No, no entiendo nada.
-Bueno entonces ¿me vas a dejar que te cuente lo que pasó realmente?
-Supongo que no pierdo nada por escucharte, aunque tampoco me agrada la idea de recordar todo de nuevo.
-Vale, ¿puedo pasar? ¿O vamos a hablar aquí?
-Venga, pasa.

Raúl la deja pasar, Angie camina nerviosa por aquella casa.
-Por aquí, vamos al salón.
-OK.

Aday que todavía se pregunta quien puede ser el que ha tocado a esas horas de la mañana para despertarlo empieza a bajar las escaleras en busca de Raúl.
-Raúl ¿Quién era?

-¿quién es?-pregunta Angie extrañada y en voz baja.
-Es mi mejor amigo, vive conmigo.
-¿Tu mejor amigo sigue siendo el mismo no?
- Si, Aday, el mismo con el que salió tu amiga en aquellos tiempos.
-Ah.

-Hola..¿ tu no eres Angie?-Pregunta extrañado.
-Hola, si soy Angie, veo que te acuerdas de mí, y de mi nombre, raro- Dice Angie sonriendo por primera vez desde que llego.
-Si bueno, después de la bronca que me echaste por hacerle aquello a tu amiga como para olvidar tu nombre.
-Bueno…
-Aday, Angie ha venido para hablar conmigo y no creo que sea el momento de recordar todas las cosas que pasaron en ese momento-Dice Raúl cortándola.
- Ah bueno, me voy a dormir otra vez entonces. Hasta otro dia Angie
-No habrá otro dia.

Angie tiene una mirada triste por lo que acaba de decir Raúl, le ha dolido y el no sabe cuanto. Pero no dice nada y hace como que no le importa demasiado. Una vez Aday se ha ido empiezan a hablar.
-Bueno, ¿has venido para hablar conmigo no?
-Si, bueno no se por donde empezar pero.. la verdad es que te mentí. Yo no me fui porque mi madre tuviera un trabajo en Francia. Me fui porque las cosas aquí andaban muy mal.¿ Recuerdas que mi padrastro estaba en la cárcel por maltratar a mi madre?
-Si, lo recuerdo.
-Pues cuando nos fuimos el acababa de salir de la cárcel, no sé como ni tampoco el por que pero el habia salido de la cárcel y mi madre al enterarse pensó que lo primero que haría ese hombre era ir a mi casa de nuevo. Y así fue. Ese hombre volvió a mi casa. Pero nadie le abrió la puerta. Es más, estuvimos un dia entero sin salir porque el rondaba por allí para entrar en la casa o hacernos algo fuera. Teniamos mucho miedo y llamamos a la policía para poner una orden de alejamiento. Con esto él cogió algo de miedo y se fue de allí. Pero mi madre decidió que nos fueramos ya que ese hombre era capaz de cualquier cosa y ambas estábamos aterradas, asi que cogimos nuestras cosas y nos fuimos.

Raúl que ha estado atento a todo lo que decía se ha quedado de piedra al oir todo lo que le estaba diciendo y no sabía que decir.

-¿ y por qué no me contaste esto antes? ¿y por que me dejaste? Podíamos haber hecho algo para arreglar todo esto.
-No Raúl no podíamos hacer nada. No te lo conté porque era peor decirte todo esto, decirte la dura realidad y que supieras cuanto estaba sufriendo en aquel momento, y no veía justo que tu sufrieras como tampoco vi justo que lo siguieras haciendo estando conmigo y no poderme ver, por eso fue por lo que te llame aquel día y te dije que habia encontrado a otra persona, porque quería que te olvidaras de mi y no vi otra manera de hacerlo, y aunque supiera que me ibas a odiar para siempre lo hice porque te quería y no podía hacerte sufrir más. Cada dia echaba mas de menos oir tu voz, que realmente era lo único que me hacia feliz en aquellos momentos tan duros de mi vida, cada dia me iba arrepintiendo mas de haber hecho lo que hice pero no tuve otro remedio. Con todo esto no te quiero decir que vuelvas conmigo ni mucho menos porque sé que tu habras hecho tu vida pero solo quería que supieras la verdad y no me guardaras rencor por el resto de tu vida.

Con todo esto Angie no ha podido aguantar mas y se le han saltado las lágrimas, esta a punto de ponerse a llorar y ahora Raúl esta peor que antes, el también tiene ganas de llorar aunque realmente no sabe el por qué.

-Angie no se que decirte, siento haberte tratado así cuando te he visto pero es que entiéndeme pensaba que todo era diferente.
-Ya lo sé y te entiendo. Con esto solo quería que tu también me entendieras a mi.
- Y en cierto punto lo hago.

Silencio.

-Bueno y si ese hombre anda suelto ¿como es que estas aquí de nuevo?
-pues porque hace unos 7 meses nos enteramos de que ese hombre habia muerto y que ya no habia ningun peligro, decidimos volver y otra vez deje a alguien atrás, le habia cogido mucho cariño a una chica, la única amiga que tuve en todo ese tiempo, aunque no reemplazo a mi mejor amiga, a Carol.

-Angie la verdad es que me alegro de que me hayas contado todo esto aunque sea ya tarde y haya pasado mucho tiempo como también me alegro de que las cosas hayan cambiado y ya ese hombre no pueda hacerte nada. Y me atrevo a decirte que me tienes aquí para lo que sea.
-Gracias Raúl.
-De nada.
-¿ te puedo pedir un favor?
-Si, lo que quieras.
-Dame un abrazo.

Raúl hace caso a lo que le pide, sabe que ella necesita ese abrazo, tanto como él necesito sus besos y abrazos en aquellos días de soledad. Pero Angie que sigue enamorada de Raúl se va aproximando a él, primero se acerca a uno de sus cachetes que besa delicadamente, luego se va deslizando poco a poco hasta rozar sus labios. Raúl no se esperaba que hiciera eso y sin pensarlo mas se levanta decidido.
-Angie lo siento pero esto no puede ser.
-¿por qué no?
-pues porque lo que paso entre nosotros se quedo en el pasado, yo ahora tengo a alguien en mi vida, alguien que me llena de verdad, alguien a quien quiero..
-ya entiendo.
-me alegro de que lo entiendas.
-Lo siento.

Y sin decir más nada esta se levanta del sillón y se dirige hacia la puerta por la que ha entrado y por la que no espera volver a entrar.
-Angie espera.

Se da la vuelta y ya no puede aguantar tanta presión y rompe a llorar. Verlo le ha costado mas de lo que un dia se pensó. Imagino un momento mágico para los dos pero en el fondo sabia que eso no iba a pasar. Y se siente mal por haberlo intentado.

-No quiero que te vayas de esa manera. Ya te fuiste una vez triste y sin ganas de nada y no quiero que te vayas sin antes decirte esto.

Angie lo mira con ojos iluminados y no solo por las lágrimas, atenta sigue oyendo lo que el le quiere decir.

-Eres una chica increíble, guapa, inteligente con muchas posibilidades de encontrar el amor de una persona, solo tienes que buscarlo.
-Y lo encontré, hace tres años.
-Pero este chico no supo hacer nada por volverte a ver después de todo lo que pasó, como también hoy es feliz con otra persona, pero esto no quiere decir que no vayas a encontrar a nadie mas. Después de perderte a ti imagine que nunca mas volveria a sentir lo que sentí hasta que llego ella, mi novia, bueno.. todavía no lo es, creo, pero la quiero mucho y me estoy enamorando como lo hize contigo.
-Ojalá encontrara a otra persona y aunque me duela realmente me alegro de que tu seas feliz y hayas encontrado a la persona que quieres.
-Pues si, tengo suerte.
-y.. ¿Cómo se llama?
-Sara.
-Bonito nombre.
-Ella lo es aun mas.
-tiene una suerte increíble de tenerte con ella, espero que ella si sepa cuidarte y tenerte por mucho tiempo
-yo también lo espero.
-Bueno es hora de irme, he quedado con unas amigas que hace tiempo que no veo, espero que tu vida siga siendo igual que lo ha sido hasta ahora o incluso mejor.

Capitulo 17

Son las 6 de la mañana. Sara ya se ha despertado incluso antes de que le sonara su despertador, como siempre a las 6 y media. Se levanta, ya que no puede dormir más, esta nerviosa, piensa en todas las cosas que pasaran ahora, como será su relación con Raúl, cuando lo verá, desde hace unos días siente un cosquilleo en su barriga, un cosquilleo que nunca había experimentado. Va al baño y se mira al espejo. Tiene los pelos despeinados, sus rizos descolocados. Vuelve a su cuarto, coge la ropa y vuelve al baño. Se desnuda lentamente intentando no hacer ruido, ya que su hermana pequeña aun duerme y sus padres están preparándose. Se mete en la bañera, abre el grifo, agua tibia. No puedo creerme que me tenga que bañar con el agua asi-piensa Sara. A ella solo le gusta bañarse con agua caliente. Pero se da cuenta de que tal vez el termo se haya apagado. Sale de la bañera, se enrolla en la toalla y baja las escaleras.
-Buenos días Mamá, el agua no sale caliente, ¿se ha apagado el termo?
-Buenos días cariño, creo que nos hemos quedado sin gas, tendrás que bañarte con el agua así.
-¿pero como me voy a bañar con el agua asi?
- Aún esta tibia, no es que te vayas a bañar con agua totalmente fría, venga deja de quejarte y vete a bañarte.

Sara sube las escaleras, llega al baño y se vuelve a meter en la bañera. No hay otra opción, tiene que bañarse con el agua asi, mirándolo bien, mejor tibia que fría. Mientras se baña sigue pensando en todo lo que paso el dia anterior. Se siente bien pero hay algo que no la hace feliz del todo, no sabe el qué. Tal vez el pensar que todo esto se pueda acabar, o tal vez pensar que lo va a dejar de querer. Termina de bañarse, sale de la bañera y empieza a secarse. Se viste. Hoy ha elegido ponerse unos pantalones cortos, un suéter negro que pone “ I love París”, una camisa negra de asillas y sus all star negras. Se peina el pelo con suavidad y mira la hora. Las 7 menos cuarto, aún tiene tiempo de sobra para arreglarse, hoy saldrá de casa más temprano. Termina de peinarse y se dirige a su cuarto. Coge el Ipod y los cascos y se los coloca por dentro del suéter, pero sin ponérselos. Va al cuarto de su hermana y empieza a despertarla. La niña que aún tiene mucho sueño la mira y le da la espalda. Sara se rie y sigue despertándola.

-Venga Moni, que tienes que arreglarte para ir a clase.
-Jo que tengo sueño.
-Y yo también, pero tenemos que ir a clase, además le tienes que dar de comer al pececito o si no se te morirá.

La niña da un salto y se queda sentada en la cama. Sara sabia que diciéndole eso la niña se iba a levantar.

-Es verdad, mi pececito, se morirá de hambre si no le doy de comer.
-Pero primero vete al baño a lavarte la cara, luego le das de comer.

Mónica, como de costumbre, hace caso a su hermana, se lava la cara y los dientes y vuelve a su cuarto, coge la comida de su pececito y le da de comer, luego mira a Sara como diciendo: “ Ya le he dado de comer, soy responsable” y entonces Sara vuelve a reírse.

-Venga princesa, a vestirse.
-Hoy me quiero vestir como tú.
-¿Te vas a poner pantalones cortos?
-Si, pero con unas medias, sino me dará frío.

Sara ayuda a su hermana a buscar la ropa, recuerda que su hermana también tiene unas all star negras y un suéter muy similar al de ella, se lo compraron juntas, solo que el de su hermana pone “ I love NY”. La niña va al espejo del baño. Sara va tras ella.
-¿ves?, soy igual que tú.
-Jajaja ay enana, tú eres más guapa.
-Eso no es verdad.
-Sí que lo es.
-Bueno, bueno, las dos iguales.
-Bueno vale jajaja. Venga vamos a desayunar.

Las dos bajan las escaleras, Mónica va delante, orgullosa de la ropa que lleva ese día y orgullosa de ir como su hermana. Su madre las ve aparecer y les sonríe.
-Por lo visto hoy se han puesto de acuerdo para ir iguales ¿no?
-Si mamá, ¿a que estamos guapas?-dice la niña.
-Claro que si cariño, venga a desayunar.

Todos se sientan en la mesa de la cocina, menos su padre que come rápido porque se le está haciendo tarde para ir a trabajar. Las chicas comen despacio, todavía les queda tiempo. Su madre se levanta rápido y empieza a fregar la losa. El padre apurado mirando el reloj se despide de las tres y sale a prisa de su casa. Cuando acaban de desayunar suben al baño a lavarse los dientes, luego cogen las cosas de clase y vuelven a bajar a la cocina donde se encuentra su madre secando la losa.
-Bueno mamá nosotras nos vamos ya.
-¿hoy llevas tú a tu hermana?
-Sí, es temprano y me dará tiempo para llegar a clase, si quieres la voy a recoger para que no salgas del trabajo con prisas para volver a entrar.
- Está bien, gracias hija, la verdad es que hoy no me iba a dar tiempo de salir a buscarla tengo que estar hasta más tarde, asi que comerán solas. La comida está en la nevera solo tienen que calentársela luego recoge la cocina pero que tu hermana te ayude.
-Vale mamá, nos vamos ya, hasta después.
Las dos se despiden de su madre y con las cosas ya listas salen de su casa. Comienzan a caminar y Sara oye a alguien que la llama.
-Sara, Sara.
Ella se da la vuelta y comprueba que es él. Es Aitor. Sin saber porque Sara se ha puesto nerviosa desde que oyó su voz. El chico con una sonrisa en la cara la mira y va hacia ella para saludarla. Sara le dice que tiene prisa que ya se verían otro día con más tranquilidad para seguir hablando. Entonces cada uno se va por su lado. Sara va a casa de Paula para ir las dos juntas a llevar a su hermana al colegio.
-¿ A dónde vamos? El colegio está por allí- pregunta Mónica
-Ya lo sé, vamos a ir a buscar a Paula para no ir yo sola después.
-Ah vale.

Llegan a casa de Paula. Sara toca en el portero y sale Paula.
-¿quién es?
-Soy Sara, ¿ya estás arreglada?
- Si ya bajo, ¿vienes con alguien?
-Sí, estoy con mi hermana que tengo que llevarla al colegio.
-Vale pues cojo las cosas y bajo, hasta ahora-Y cuelga.

En menos de dos minutos Paula está en el portón.
-Hola, ¿por qué vienes hoy tan temprano?
- Pues porque no podía dormir y me arregle antes y aprovecho para llevar a mi hermana al colegio.
-¿Y por qué no podías dormir?
- Ya te contaré.
-Vale.
Guardan silencio el resto del camino hacia el colegio. Dejan a la niña con sus amigas y esperan a que entre en clase para poder irse. Empiezan a caminar despidiendo a la niña con la mano.
-Bueno y¿ por qué no podías dormir?
- A ver.. te cuento.. ¿Tú te acuerdas que yo te había enseñado fotos con un niño súper bonito? De cuando éramos pequeños.. qué creo que tu lo llegaste a conocer.. qué se llama Aitor.
-Si me acuerdo jajajaja ¿Qué pasó?
-Bueno pues que ayer después de haber estado con Raúl, en el tranvía volviendo a mi casa, me vi a un chico que me miraba, y me hablo, y entonces empezamos a hablar y resulta que era él, Aitor y claro empezamos a hablar y ¿a que no sabes que me dijo?
-No, ¿Qué te dijo?
- Pues que se estaba mudando a una casa que queda a dos calles de la mía.
- Que fuerte te lo tendrás que ver todos los días ahora.
-Pues sí, hoy por ejemplo me lo vi y no sé me siento rara hablando con él, y lo agregue al tuenti y cuando le conté algo sobre Raúl me dio la sensación de que no le gustaba que le hablara de él no sé.. algo raro.
-Tal vez le sigas gustando después de tanto tiempo.
-No sé no lo creo, hace muchos años de eso.. se me haría un poco raro de creer..
- Ya, pero puede pasar.
- Ay no se, pero no quiero comerme la cabeza con esto, yo estoy muy bien con Raúl y quiero seguir igual.
-Pues despreocúpate entonces.
-Bueno.. y tu ¿Qué tal con Pablo?
-Pues bien.. no lo he visto pero hemos estado hablando por teléfono, hoy a lo mejor quedamos por la tarde ya sabes.. tarde de amor.
- Jajajajajaja pues yo hoy voy con mi hermana a comprarle un pececito.
-¿un pececito?
- Si un pececito, fue a una excursión y le regalaron uno y como está sólo le dije que le compraba uno para que le hiciera compañía.
- Sin duda además de ser la mejor amiga del mundo también eres la mejor hermana.
-Como tú.
- Si, sobre todo con mi hermano que nos pasamos el día peleando.
-Me refería a ser la mejor amiga…
-Ya lo sé, sólo era por oírte.
-Idiota.
-Lo sé

Y mientras Sara y Paula van felices a clase riendo entre ellas otros no están tan contentos.